Aung San Suu Kyi, un año mas de arresto
Hace unos años pasamos, posiblemente, las vacaciones más extrañas? de nuestras vidas. Fue en Myanmar y durante tres semanas Yolanda y yo nos dedicamos a recorrer la antigua Birmania.
Un país de contrastes, donde es imposible ir solo a ningún lado. Donde la vigilancia es total: Donde atentados y guerrillas están al orden del día. Unas por motivos étnicos-políticos, otras por el control de los estupefacientes, es el triángulo de oro, (Tailandia, Laos, Myanmar) donde se produce la mayor cantidad de pastillas del mundo. En un bolso de mano se pueden llevar más de 30.000 éxtasis y donde los diamantes y el oro cuestan lo mismo que cualquier bisutería en El Rastro.
Un viaje inolvidable donde pudimos ver esclavitud infantil, violencia de todo tipo, muchas hambre y despilfarro. Nuestro viaje en ferrocarril entre las dos ciudades más importantes del país, Rangún y Mandalay, supero las veinticuatros horas, para cubrir una distancias similar a la que hay entre Madrid y Barcelona. Íbamos en un departamente cuatro personas sin poder salir del mismo, y sin servicio de bar o restaurante. Paradas eternas en medio de la selva, donde se producían enfrentamientos entre guerrillas y militares. En algunos hoteles aislados no podíamos salir a partir de la cinco de la tarde, en otros podíamos, como en Bagan, ir a cenar en bicicleta y volver de madrugada sin problemas. Sus teatros de marionetas son magníficos. Los karaokes sitios de prostitución infantil para la comunidad china que controla la mayoría de los negocios. La presencia de turistas occidentales es escasa.
En el hotel de Rangún, la capital, tuvimos acceso a las páginas amarillas. Solo cuatro países de la Unión Europea tenían sede diplomática, una treinta de todo el mundo, No teníamos acceso a internet y solo pudimos hacer tres llamadas telefónicas a Madrid, cuando lo habitual es que lo hiciéramos todos los días ya que Lucia tenía cuatro años. En los telediarios la información consistía en leer el único periódico que existe.
Al volver intentamos escribir un artículo sobre el tema. El País y El Mundo se negaron. Conseguimos hacerlo en El Pais de Otro Mundo, el periódico editado por la CGT. Pudimos comprender de primera mano, que donde no hay evidentes intereses económicos por medio, lo que pase no es noticia.
Hoy se cumplen 17 años de la aplastante victoria electoral de NLD, no la LND como escriben en El País. La Liga por la Democracia arrasó y los militares dieron un golpe de estado que les mantiene en el gobierno desde entonces. Aung San Suu Kyi se convirtió en la lider opositora del país. Es venerada pero la gente no quiere hablar de ella. Existe mucho miedo. Quisieron echarla del país, pero ella no consistió. Ha obtenido el Premio Nobel de la Paz, el Thorolf Rafto, el Sajarov y el Simón Bolivar. Desde hace años permanece en arresto domiciliario. Hoy tenía que haber salido a la calle y los militares la han condenado otro año más.
Mientras esto ocurre en Occidente seguimos callados ante una de las dictaduras mas crueles de la actualidad. Donde el máximo responsable de la misma ha trasladado todos los ministerios de la capital a la selva. Unos dicen que por los consejos de una intérprete de sueños, otros por medio a la población o alguna invasión externa.
Si quieres saber más de Aung San Suu Kyi hay un magnífico libro en castellano con su textos: “Cartas desde Birmania”, editado por Circe.
Un país de contrastes, donde es imposible ir solo a ningún lado. Donde la vigilancia es total: Donde atentados y guerrillas están al orden del día. Unas por motivos étnicos-políticos, otras por el control de los estupefacientes, es el triángulo de oro, (Tailandia, Laos, Myanmar) donde se produce la mayor cantidad de pastillas del mundo. En un bolso de mano se pueden llevar más de 30.000 éxtasis y donde los diamantes y el oro cuestan lo mismo que cualquier bisutería en El Rastro.
Un viaje inolvidable donde pudimos ver esclavitud infantil, violencia de todo tipo, muchas hambre y despilfarro. Nuestro viaje en ferrocarril entre las dos ciudades más importantes del país, Rangún y Mandalay, supero las veinticuatros horas, para cubrir una distancias similar a la que hay entre Madrid y Barcelona. Íbamos en un departamente cuatro personas sin poder salir del mismo, y sin servicio de bar o restaurante. Paradas eternas en medio de la selva, donde se producían enfrentamientos entre guerrillas y militares. En algunos hoteles aislados no podíamos salir a partir de la cinco de la tarde, en otros podíamos, como en Bagan, ir a cenar en bicicleta y volver de madrugada sin problemas. Sus teatros de marionetas son magníficos. Los karaokes sitios de prostitución infantil para la comunidad china que controla la mayoría de los negocios. La presencia de turistas occidentales es escasa.
En el hotel de Rangún, la capital, tuvimos acceso a las páginas amarillas. Solo cuatro países de la Unión Europea tenían sede diplomática, una treinta de todo el mundo, No teníamos acceso a internet y solo pudimos hacer tres llamadas telefónicas a Madrid, cuando lo habitual es que lo hiciéramos todos los días ya que Lucia tenía cuatro años. En los telediarios la información consistía en leer el único periódico que existe.
Al volver intentamos escribir un artículo sobre el tema. El País y El Mundo se negaron. Conseguimos hacerlo en El Pais de Otro Mundo, el periódico editado por la CGT. Pudimos comprender de primera mano, que donde no hay evidentes intereses económicos por medio, lo que pase no es noticia.
Hoy se cumplen 17 años de la aplastante victoria electoral de NLD, no la LND como escriben en El País. La Liga por la Democracia arrasó y los militares dieron un golpe de estado que les mantiene en el gobierno desde entonces. Aung San Suu Kyi se convirtió en la lider opositora del país. Es venerada pero la gente no quiere hablar de ella. Existe mucho miedo. Quisieron echarla del país, pero ella no consistió. Ha obtenido el Premio Nobel de la Paz, el Thorolf Rafto, el Sajarov y el Simón Bolivar. Desde hace años permanece en arresto domiciliario. Hoy tenía que haber salido a la calle y los militares la han condenado otro año más.
Mientras esto ocurre en Occidente seguimos callados ante una de las dictaduras mas crueles de la actualidad. Donde el máximo responsable de la misma ha trasladado todos los ministerios de la capital a la selva. Unos dicen que por los consejos de una intérprete de sueños, otros por medio a la población o alguna invasión externa.
Si quieres saber más de Aung San Suu Kyi hay un magnífico libro en castellano con su textos: “Cartas desde Birmania”, editado por Circe.
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